En nuestro blog anterior, compartimos consejos sobre cómo los bolsos artesanales de ROGIAS pueden hacer la vida más fácil cuando salimos de casa. En este artículo, queremos contarte por qué es tan positivo para el desarrollo de tu peque que imite a mamá, y cómo esto puede ayudarle cuando llega un hermanito o hermanita. Además, descubrirás cómo nuestros bolsos a juego para madre e hija pueden tener un papel precioso en todo este proceso.
Aprender imitando
Seguro que lo has visto mil veces: a los niños les encanta copiar a sus padres. Lo hacen cuando repiten gestos cotidianos como llevar un bolso, vestir muñecas, limpiar o “trabajar” con el portátil. Pero imitar no es solo un juego, es una parte esencial del desarrollo infantil.
Los niños aprenden observando e imitando. Cuando tu peque te ve organizarte, hacer varias cosas a la vez, cuidar de otros o recoger la casa, en realidad está recibiendo una pequeña clase maestra de responsabilidad. Copiar lo que hace mamá—como preparar su propio bolso con “cosas importantes”—es lo que llamamos aprendizaje por modelado. A través de esto, desarrollan:
- Autoconfianza (“¡Yo también puedo!”)
- Sentido de la responsabilidad
- Habilidades motoras (abrir cremalleras, meter y sacar objetos)
- Inteligencia emocional
Gestionar las emociones
A los niños pequeños les cuesta más procesar los grandes cambios que a los mayores. Aquí, el aprendizaje por imitación también es fundamental. Cuando juegan a ser mamá con su propio bolso o en un rol de cuidador, están aprendiendo lo que significa ser “mayor”. Esto resulta especialmente útil cuando hay un nuevo hermanito en camino.
Adaptarse a una nueva situación familiar siempre requiere un periodo de ajuste. Si tu hijo/a se siente importante gracias a pequeñas tareas o responsabilidades, la transición será mucho más fácil. Además, es menos probable que aparezcan sentimientos de exclusión y se fomenta la empatía.
Consejos para casa
- propio bolso: Dale a tu peque un bolso con objetos de verdad (por ejemplo, toallitas pequeñas, una libreta, unas gafas de sol, etc.).
-
Pide ayuda: Anímale a encargarse de coger cosas del bebé cuando haga falta.
-
Cambiar de rol: Jugad juntos a “mamá e hijo/a” para que tu peque pueda ponerse mentalmente en tu lugar.
Bolsos de paseo como ritual de unión
Nuestros bolsos de paseo no son solo un complemento. Pueden convertirse en un ritual precioso que os une: preparar los bolsos juntos antes de salir, sentirse preparados y organizados. Poco a poco, tu peque se sentirá más responsable de sus propias cosas, y notará ese orgullo de “yo también formo parte”. Y sí, tendrás que asumir que de vez en cuando también repetirá alguna de esas frases menos encantadoras que dices sin querer.